Desde Cume-có (Pirovano, Pcia. de Buenos Aires) nos viene como anillo al dedo -para el comienzo de la Cuaresma- esta Pietá pampeana. A sus pies, en una inscripción se lee:
Oh Madre, fuente de amor, hazme sentir tu dolor para que llore contigo!
si si, cume có es flor de casona, antigua, muy elegante, y con muchos aires ingleses... En los jardines, además de esta estatua, hay otras, con los brazos rotos y medio descuidadas, pero conservan todo el encanto... además, en cumec có me caí del caballo y me disloqué cúbito y radio, asique tengo muy gratos recuerdos... tuvimos que ir corriendo (es un decir, en realidad fuimos en auto) hasta bolivar (a unos 60 kms...) y sacar al traumatólogo de guardia de un asado qeu estaba comiendo (era sábado de noche) para que me ponga los huesos de vuelta en su lugar... tanti ricordi!! slds m
Precioso. Gracias por no mostrar el asado, mira que hoy miércoles de ceniza se acrecienta el deseo de comer lo prohivido. Qué tendrá el ser humano que somos así: basta que nos priven de algo para anhelarlo.
Conoces a la Hermana Josefina que vive allá? no sé si te he dado el enlace..la edad, ya sabes... Blog Borrador Ojalá te guste, es simpática. Es curioso encontrar una monja blogger.
Martincho! Ya casi me había olvidado de ese episodio traumatológico. Capaz que fue para estar a tono con las estatuas de los brazos rotos. Se ve que además los Varela tenemos nuestros problemas con la equitación. Pero no te preocupes, ya no se usa tener uno atado a un palenque en la puerta de tu casa. Aunque acordate de los cuentos de toro sentado.
Desde Cume-có (Pirovano, Pcia. de Buenos Aires) nos viene como anillo al dedo -para el comienzo de la Cuaresma- esta Pietá pampeana. A sus pies, en una inscripción se lee:
4 comentarios:
si si, cume có es flor de casona, antigua, muy elegante, y con muchos aires ingleses... En los jardines, además de esta estatua, hay otras, con los brazos rotos y medio descuidadas, pero conservan todo el encanto...
además, en cumec có me caí del caballo y me disloqué cúbito y radio, asique tengo muy gratos recuerdos... tuvimos que ir corriendo (es un decir, en realidad fuimos en auto) hasta bolivar (a unos 60 kms...) y sacar al traumatólogo de guardia de un asado qeu estaba comiendo (era sábado de noche) para que me ponga los huesos de vuelta en su lugar...
tanti ricordi!!
slds
m
Precioso. Gracias por no mostrar el asado, mira que hoy miércoles de ceniza se acrecienta el deseo de comer lo prohivido. Qué tendrá el ser humano que somos así: basta que nos priven de algo para anhelarlo.
Conoces a la Hermana Josefina que vive allá? no sé si te he dado el enlace..la edad, ya sabes...
Blog Borrador
Ojalá te guste, es simpática. Es curioso encontrar una monja blogger.
Gracias Aeronauta por tus comentarios.
Voy a visitar el blog que me recomiendas con mucho gusto.
j.a.varela
Martincho! Ya casi me había olvidado de ese episodio traumatológico. Capaz que fue para estar a tono con las estatuas de los brazos rotos.
Se ve que además los Varela tenemos nuestros problemas con la equitación. Pero no te preocupes, ya no se usa tener uno atado a un palenque en la puerta de tu casa. Aunque acordate de los cuentos de toro sentado.
papá
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