Bien abrigado para el invierno , Llorenç nos mira -todo ojazos- desde su Lamborghini .
Padre y padrino de lo más orondos. Malala los recibió por todo lo alto y pasaron un fin de año inolvidable. La foto es ya al regreso hacia Barcelona, pasando por Clermont-Ferrand. ¡Qué frío!
3 comentarios:
Eduardo está medio vaca o es la foto?
Muy lindas las fotos.
Saludos
Carlos
Gordo:
Moderate que tus antecedentes son también bovinos.
pará papein... lo que pasa es que estoy salado...
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